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Isabel Malpica

En eso pienso

Una radio,
un audífono.
Un joven camina…
Una anciana…
Una niña…
Un adolescente…
Los veo desde la vidriera del bar.
Cerveza, gaseosa, café, empanadas…
Gente que está en el bar.
Murmullos, risas, charlas,
enamorados que se miran a los ojos.
Veo a alguien con el ceño fruncido,
preocupado.
Risas fuertes, ruido,
música fuerte que perturba.
Pero a mí no me molesta.
Pienso…En qué pienso?
En el joven de la radio con audífono que camina,
en la anciana,
en la niña,
el adolescente que ví desde la vidriera del bar,
la cerveza, la gaseosa, el café,las empanadas,
la gente que aún está en el bar.
Siguen los murmullos,
las risas, las charlas,
los enamorados que ahora se toman las manos.
El señor que sigue con su ceño fruncido y preocupado.
Las risas fuertes, el ruido,
la música que perturba… pero no me molesta
En eso pienso.

La vida

Me abstraigo,me distraigo.
Tengo mucho de niña…
Y tengo setenta y uno.
Es bueno pasar por todo,
por el cielo y por el lodo.
Se aprende, se valora.
La vida es un tesoro,
que cuesta mucho encontrar.
Si! No se puede negar.
Pero hay que seguir buscando.
Está y hay que encontrarlo.

Invierno y primavera

La vida tiene estas cosas:
El cielo a veces es gris
y otros de color rosa.
Nada es igual.
Es mejor que así sea.
Invierno y primavera.
 
No me sirve deprimirme,
hay algo de que reírme.
Atrás mío en el baruna pareja discute,
yo la escucho sin querer.
Es natural que lo hagan,
pueden llegar a un acuerdo.
O quizás no.
No importa, es así.
Dos personas diferentes.
Nadie es igual.
Y si fueran,
no hay de qué hablar,
si piensan lo mismo de que sirve?
Es monótono, aburrido.
¡Qué bueno es ser distinto!
Cada uno con sus sueñosy sus ganas de hacer cosas.
Distintas.
Mejor distintas.
Pueden ser maravillosas.
Escribo porque me gusta.
No interesa lo que digo.
Me sirve, eso ya es mucho.
Ahora me fumo un pucho.

La Alameda 23/09/2006

Escribir. Pensar.
Ver la gente pasar,
cada persona
sus ideas,
sus ideales,
que parecen utopías
pero a veces son reales.
Estoy sola en un bar.
Viendo la gente pasar.
Cada uno en lo suyo.
Y yo estoy en lo mío.
Es así.
No puede ser de otro modo.
Por qué yo me incomodo?
Nadie puede comprenderme.
Ni yo tampoco entenderle.
Cierra el bar.
Y debo irme sin rumbo
a cualquier lugar,
a ver la gente pasar.